Propuesta 85 – Taller de CREATIVIDAD LITERARIA

taller-de-creatividad-literaria-85Primero debéis elegir un objeto que de algún modo os represente o con el que os identificáis.

Después, en un papel aparte, haced una lista de razones por las que os identificáis con ese objeto y pensad sobre los motivos que habéis anotado: ¿cuál es el más importante o el que transmite la imagen más clara de vosotros mismos?

 

 

Por último, tomad esa idea como punto de partida para escribir un poema sobre ese objeto con no más 32 versos.

 

 

 

 

.

Recordad que para contar los caracteres de un texto, podéis usar el menú Herramientas de Word o cualquier contador de caracteres en línea como estos:

 

 


Enviad vuestros textos en el espacio para los comentarios.

Para ver todo el taller de Creatividad literaria, pulsa AQUÍ.

.

.

El libro de mi creatividad literaria

EL LIBRO DE MI CREATIVIDAD LITERARIA
*
Un libro con más
de cien propuestas
para desarrollar tu creatividad
escribiendo historias.
*
Completar las más de cien propuestas de redacción de El libro de mi creatividad literaria ayuda a aumentar nuestra capacidad de invención y guía paso a paso para aprender a escribir historias originales y coherentes.
*

  3 comments for “Propuesta 85 – Taller de CREATIVIDAD LITERARIA

  1. Narradora de Cuentos
    28 noviembre, 2016 at 19:08

    Un libro abierto
    Un libro abierto te ofrece su historia sin dobleces, te hace partícipe de las luces y las sombras de sus personajes, sin trampa ni cartón. Cuando un libro cae en manos de un lector, puede bucear libremente por el, de la misma manera que mi personalidad, permite con mi trato espontáneo y cercano, darme enseguida a conocer.

    Conmueve con el libro abierto de la vida
    desgranando, palabras, hechos y emociones
    Dando puntadas día día a los recuerdos
    bordando primorosa, sonrisas y lamentos

    Sorprende sin rubor al que te lea
    dejando tu esencia entre las páginas
    la tinta que grave tus vivencias
    ira a parar al alma que ávida recorra tus estrofas

    Renglones torcidos dejamos todos
    por aplicada caligrafía que con esmero esbocemos
    Transmite vitalidad en tu intensa pluma
    aunque el pulso pierda brío en el recodo

    Derrapemos por los caminos de la vida
    si miedo a las caídas y tropiezos
    de su mano llega el aprendizaje
    tras la reflexión y la duda el crecimiento

    Que caigan con naturalidad del ánimo
    dejémoslas bailando en el papel
    Al gozo, a la alegría , al amor
    a la amistad, al canto, al alborozo

    Dibujemos señales de una vida plena
    en los tramos recorridos de nuestros afectos
    con ellos permaneceremos vivos
    en la cálida eternidad de su recuerdo

  2. Sandra Carrion Estay
    5 diciembre, 2016 at 04:36

    Una silla de ruedas
    Elijo una silla de ruedas porque me representa, no me identifica. Y aunque la propuesta es elejir un objeto que te identifique, tengo ganas de escribir sobre ella.

    Cuando mis piernas ya no me sostienen
    cuando ellas no me pueden trasladar
    eres bienvenida y se agradece tu estar.

    Nadie quiere llegarte a usar
    solo la necesidad te va a llamar
    y por èsta te van a odiar.

    Eres un feo aparato que cumple con una funciòn
    reemplazar los movimientos que ya no hay.

    Debo agradecer tu existencia
    aunque otros no lo entiendan
    solo aquel que la usa comprenderà lo que digo.

    Eres un artefacto que nadie quiere usar
    pero rompes las barreras
    que me impone la sociedad.

    La sociedad me margina al verme llegar en ti
    desconociendo el camino que recorrì
    para aceptar que eres parte de mi.

    Debo ser màs que el resto
    para que confìen en mi
    no es justa la exigencia por estar asì.

    Cuando voy a un lugares diferentes
    tus dimensiones son las relevantes
    y debo preocuparme de si èstas son las adecuadas.

    Antes de llegar yo a cualquier parte
    llega el aparato que me conduce
    pasando a segundo plano mi propia presencia.

    Si eres una silla de ruedas
    un artefacto sin vida
    no deberìa ser màs notorio que mi propia vida.

    El dìa que me muera
    deberìan enterrarme con ella
    pero si no eres visible vivo menos lo seràs muerto

    A cada sitio al que voy
    manejando mi silla
    debo pedir disculpas por incomodar con mi aparato.

    • Narradora de Cuentos
      9 diciembre, 2016 at 00:44

      Has hablado de ella, me la has presentado y le he perdido el miedo… ya no la veo, ó si porque forma parte de ti y te da libertad… Pero lo único aquí notorio eres tu y tus palabras que han anulado su presencia, hasta dejarla en un vaga presencia, tras una mujer que quizá se desplaza sentada pero vive con el alma de pie

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


*